19 – Hojas y un pico

                He adormitado demasiado tiempo en este casi mes que tanto me ahogó, a tal punto que perdí la noción de mi escritura. No te preocupes, no ha estado pasando mucho de lo que haya que hablar. Dese aquellas fechas en las que empecé a oír gritos donde no existía ni un susurro —tras el … Sigue leyendo 19 – Hojas y un pico

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16 – ya soñaba con una familia

                ¿Qué es el amor? Tal vez no debería apuntar tan alto, ¿Qué es el cariño?                 ¿Qué es esto de acercarse a la gente? Y que los corazones se miren dulcemente ¿Qué es esto de encariñarse con extraños? A los que no puedes llamar amigos ¿Cómo es esto de sentir cosas tú solito por … Sigue leyendo 16 – ya soñaba con una familia

Café con gusto a verso

                Una mañana me hallaba yo disfrutando de la soledad, con un café recién hecho que preferí tomar frente a mi computadora de escritorio. Me senté moviendo la cuchara entre aquel elixir cafeinoso y cuando me dispuse a darle el primer sorbo, un colibrí apareció en mi ventana.                 —Bienaventurado seas, porque aquí llegué para … Sigue leyendo Café con gusto a verso

Manos que abrigan

            Las luces del pasillo parpadeaban como un miope con los ojos resecos, Marvin no podía recordar cómo ni porqué estaba ahí. Giraba la cabeza hacia ambos lados del anchísimo pasillo del hospital que se perdía en la lejanía, y pensaba qué, si existía alguna emergencia, vería atletas antes que enfermeros.             Estrujó sus pocas … Sigue leyendo Manos que abrigan

El mirar las horas pasar.

                Es un arte algo deprimente, este que practico. Aunque tan artístico no es. Son casi las tres de la madrugada cuando escribo esto, me hallo pensando inconclusamente que cosa escribir para siguiente entrada de mi blog. Y me dije “¿por qué no abrir un blog aparte de quejas?” Con la excusa de tener un … Sigue leyendo El mirar las horas pasar.

Improvisándole a la muerte 2

                La grácil, graciosa y tajante musa se apoyó sobre el barandal que le acogía con una vista tan única como hiriente y pecaminosa para el alma, hiriente, porque tal vez no volvería nunca a pararse en las hermosas costas romanas, y pecaminosa porque bien sabía que el dinero que gastaba podría tener un mejor … Sigue leyendo Improvisándole a la muerte 2

5 — Chiquitos como los números.

                “Los años se vuelven chiquitos como lo son los números” me dijo en la madrugada de mi primer año de vida. No creo haber entendido entonces lo que era ver pasar 365 días, uno tras otro, como corren las gotas por el río. Y no creo entenderlo del todo todavía. Entiendo que un día … Sigue leyendo 5 — Chiquitos como los números.

Una vida…

Toda la vida atrás de la pelota, mientras solo le interesaba ver crecer los querubines en el campo. Y aunque ahora tiene todos los campos que quiere, el título de florista no se lo puede poner cuando lo recordarán siempre por otra cosa totalmente distinta.

4 — Añorar lo que no tenemos

                Puede que el tiempo pase el doble de rápido cuando vivís en un cuarto cilíndrico. Porque no hubo tiempo más corto que haya existido que el que viví entre la primavera y el verano, sin sentir nada, Ni vivir nada. Fueron tres largos meses en los que arrancaba un papelito del almanaque cada día, … Sigue leyendo 4 — Añorar lo que no tenemos